No todos los técnicos son conscientes de que solo es posible obtener una tensión correcta en la correa de distribución con el motor a temperatura ambiente. Es decir, es imprescindible esperar el tiempo suficiente para que se enfríe el motor (unas cuatro horas como mínimo). Esto también se aplica a los motores equipados con un tensor de correa automático.
EXPANSIÓN
Al alcanzar la temperatura de funcionamiento, todos los motores se expanden. El calor hace que aumenten a lo alto y a lo ancho. Esta expansión no afecta al rendimiento del motor, pero tiene efectos secundarios para la tensión de la correa de distribución y el sistema de transmisión.
La expansión del bloque del motor hace que aumenten las distancias entre los componentes de la transmisión, lo que provoca que la correa de distribución se «apriete». Los fabricantes de motores conocen
las dimensiones exactas de un motor a temperatura ambiente. A partir de estas,
recomiendan la tensión de correa ideal que debe tener una correa nueva (el motor está a temperatura ambiente en la línea de montaje del motor). Si la instalación se realizase con el motor en caliente, el fabricante no podría ofrecer una tensión de correa ideal, puesto que no sabría cuál es la temperatura exacta del motor en ese momento. Esta es la razón por la que
los procedimientos de tensado siempre se desarrollan para motores en frío, tanto en el caso de los tensores de correa automáticos como manuales.
TIEMPO DE ENFRIAMIENTO
A menos que la correa de distribución se coloque con el motor a temperatura ambiente, es imposible obtener la tensión correcta recomendada por el fabricante del vehículo (incluso si el motor dispone de un tensor de correa automático). Aunque la
aguja del tensor automático se haya ajustado correctamente en la instalación, siguiendo las indicaciones del fabricante del equipo original,
dejará de estar en la posición correcta en cuanto el motor se haya enfriado. Así, no será posible obtener una tensión correcta y la correa estará demasiado floja. Por lo tanto, un motor en frío es una constante conocida por la que se debe guiar, siempre.
DETECCIÓN Y DAÑOS
Una
correa de distribución sustituida con el motor en caliente empezará a
aflojarse en cuanto este empiece a enfriarse. Una tensión de correa demasiado baja implica un engranaje inferior al ideal entre los dientes de la correa y la ranura de la polea (los dientes de la correa no se introducen del todo en la polea debido a las fuerzas centrífugas). Las marcas de la propia correa lo indican claramente. Otra consecuencia habitual es el aleteo de la correa. El calor que genera el aleteo hace que el caucho se endurezca.
Daños en la correa causados por una tensión insuficiente de la correa
Por lo tanto, si se cambia la correa de distribución con el motor en caliente, las consecuencias pueden ser irreparables:
- Desgaste prematuro.
- Posibilidad de salto de los dientes.
- Desgarro de los dientes.
- Fallo de correa antes del ciclo de servicio previsto.
- Reparación costosa.
Conclusión: esperar a que el motor se enfríe correctamente puede marcar la diferencia entre un trabajo bien hecho y un trabajo predestinado a fallar.